Turismo en Aroche

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Turismo en Aroche

Puntos de interés

El casco histórico de Aroche ocupa todo su antiguo recinto amurallado y posee una longitud perimetral aproximada de 1,5 Km., conservando todavía algo del trazado orgánico medieval, típico de las poblaciones fortificadas. Su trama viaria está conformada por calles estrechas y muy tortuosas, con trazados muy influidos por la topografía, circundando los distintos focos del Castillo, la Cilla y la Almena. Otras calles, más rectas y anchas, unen los diversos focos.

  • Turóbriga (Bien de Interés Cultural, año 2008):

La ciudad hispano-romana de Turóbriga es un yacimiento arqueológico ubicado en la Finca La Belleza, a sólo dos kilómetros del núcleo de Aroche. La ciudad pudo tener una extensión cercana a las 10-12 hectáreas. Actualmente son visitables distintos edificios, como el foro (donde se encuentran distintas estancias de uso religioso, administrativo y judicial), las termas, la casa de la Columna, la casa Norte, el Campus y la muralla, siendo el único de esta tipología visitable en la provincia de Huelva. Su existencia puede enmarcarse dentro de la romanización de la zona, ya documentada desde antiguo dado que esta ciudad es citada en obras como la Naturalis Historia de C. Plinio, en concreto como oppidum de la Baeturia Celtica en el Conventus Hispalensis.

Edificios y monumentos

Arquitectura civil

También conocido como "Puente de los Pelambres", construido por el monarca Felipe II en en el año 1577 sobre el Arroyo de la Villa, en un lugar conocido como "Los Pelambres", en el camino de Portugal, junto a la Real Aduana. Es uno de los escasos ejemplos de ingeniería de esta época. Consta de un solo vano formado por un arco de medio punto de fábrica de ladrillo rojo y plementería de mampostería ordinaria. Conserva, casi ilegible, la inscripción conmemorativa a su construcción. Este puente fue restaurado en 2005 por el Ayuntamiento de Aroche.

Arquitectura militar

Fortaleza almohade levantada a final del siglo XI o principios del XII en la cima del cerro donde se emplaza el núcleo urbano. Su entrada actual data del siglo XVIII y consta de un arco de medio punto marcado por un pináculo de factura barroca sobre la coronación de la muralla. Este castillo, siguiendo el modelo de fortalezas islámicas de la provincia, es de planta rectangular, con diez torres de planta rectangular o cuadrada, cuatro de ellas en los ángulos y seis más entre los lienzos de muralla. El castillo conserva una puerta de entrada directa que podría corresponder a la primera fase de su construcción, localizada en el flanco Sur, y que se denomina "Puerta de la Reina". En su interior existe una plaza de toros edificada en 1804.

La muralla defensiva de Aroche debió construirse hacia el año 1640 como protección ante la guerra contra Portugal, si bien existen noticias de un muralla anterior, del siglo XV. Su perímetro contó con tres puertas, al parecer todas ellas con rastrillo, y de alguna existe documentación sobre una puerta levadiza. La muralla tiene un grosor de dos metros y medio y una altura variable, ya que se va adaptando a la topografía del terreno, llegando a alcanzar por la cara exterior incluso los nueve metros. Edificada a base de mampuestos y mortero de cal, resulta evidente la enorme la obra construida a base de acarreo de piedras, arena y cal para semejante obra.

Arquitectura religiosa

Ermita de camino de tipo popular del siglo XVII, de planta cuadrada cubierta con cúpula semniesférica sobre pechinas. Cuenta con porche abierto por arcos de medio punto y cubierto de bóveda vaída. Sobre el pequeño altar se halla un retablo- hornacina de finales del siglo XVII y en el centro una imagen sedente del Cristo de la Humildad y Paciencia del granadino José de Mora. A ambos lados se muestran imágenes de Santa Gertrudis y Santa dominica de la segunda mitad del siglo XVIII.

Edificio situado en el casco antiguo, que en su estado original ocupó una manzana completa, conservándose hoy gran parte del original. Sus primeros datos documentales son de 1634, cuando recibe Bula del papa Urbano VIII para la instalación de un convento de monjes jerónimos. A las dependencias de uso religioso y agrícola se le unen otras que serían para servidumbre y almacenes de herramientas y otras para almacén de trigo. Con la Desamortización de Mendizábal se perdió su configuración original, al pasar de su uso religioso-industrial al de casa vecinal. Durante la Guerra Civil fue utilizado como cárcel y más recientemente fue comprado por la Consejería de Obras Pública y hoy en parte acoge el museo de la colección arqueológica municipal y muestra de artesanía local.

Ermita "de Repoblación", de finales del siglo XIII y principios del XIV, luego ampliada y reformada en los siglos XV y XVIII. Su relación con la ciudad romana de Turobriga, va más allá del reaprovechamiento de materiales, pues además de usar de cantera de materiales el yacimiento, la ermita se asienta sobra la propia basílica romana. La ermita tiene planta basilical, tres naves separadas por arcos apuntados, y presbiterio con bóveda nervada gótica. En el siglo XV fue decorada con importantes frescos con escenas religiosas, pero en el XVII hubo numerosas epidemias de peste en la villa, lo que obligó a usar la ermita de hospital, encalando sus paredes y ocultando durante siglos dichos frescos. En el siglo XVIII se añadieron los porches exteriores y el campanario. Ermita con un importante nivel artístico, una reciente restauración ha devuelto la luz las escenas selladas por la cal, descubiertas en los años ochenta del siglo XX.

Próxima a la Ermita de San Pedro de la Zarza, y actualmente formando parte de una casa de labor de propiedad privada, se encuentra la antigua ermita de Santa María del Valle. En ella se aprecian dos fases constructivas; la más antigua es la que corresponde al ábside semicircular, resto de una iglesia primitiva fechable en los años finales del siglo XIII y que se enmarca en el grupo de las "Ermitas de Repoblación". El resto, la nave de planta rectangular y con arcos transversales apuntados, y también la portada del hastial, son posteriores y se corresponden al siglo XV; esta última fase debió concluir con la decoración mural del ábside que se realizaría en la segunda mitad del mismo siglo.

Iglesia parroquial de grandes dimensiones que consta de tres naves de cuatro tramos, quedando el último inacabado. Su construcción se inició en el año 1483 sobre una obra anterior del siglo XIV, de la que quedan algunos restos en los pies de la iglesia. En su ejecución intervinieron algunos maestros de la catedral de Sevilla, como Diego de Riaño o Hernán Ruiz II, y muestra elementos de estilo mudéjar, gótico y renacentista. Sus portadas laterales, de Hernán Ruíz II y estilo manierista, se fechan en 1560; la de los pies es del siglo XV, y sobre sus arquivoltas góticas muestra una ventana mudéjar de inspiración toledana. Las naves laterales se cubren con bóvedas de nervadura, mientras que la central se eleva sobre las laterales y se cierra con bóvedas estrelladas en cuyas claves aparecen motivos heráldicos y florales.

Museos y galerías

Creado en 1958, ha sido objeto de modificaciones importantes, tanto en materiales como a emplazamiento. Ubicado en la actualidad en tres salas del edificio de La Cilla, el antiguo convento de la Orden de los Jerónimos, muestra una primera sala dedicada a la ciudad hispanorromana de Arucci/Turobriga, situada junto a la ermita medieval de San Mamés. La segunda sala, abierta en 2015 y que fue cárcel durante la Guerra Civil, se dedica al tesoro de 376 monedas de plata, denarios romanos documentados en la Casa Norte de la ciudad. Y la tercera muestra piezas de la Prehistoria y la Edad Moderna, donde destacan hachas, puntas de flecha, piezas visigodas, candiles islámicos y una maqueta y armas del castillo.

Actualmente ubicado en el Convento de la Cilla, este particular museo muestra un total de más de 2.000 piezas procedentes de distintos países de todo el mundo. Aquí pueden contemplarse rosarios que pertenecieron a personajes tan relevantes como tales como Juan Pablo II, la Madre Teresa de Calcuta, los reyes de España o los Príncipes de Mónaco, lo cual lo convierte, sin duda, en un museo único en el mundo.

Espacios naturales

Situado en la parte occidental de Sierra Morena, al norte de la Provincia de Huelva, y declarado Parque Natural en 1989, ocupa una superficie de 186.827 Ha. repartidas en 28 municipios de la sierra, surcada por la red fluvial de las cuencas hidrográficas de los ríos Guadalquivir, Guadiana y Odiel. La disposición de sus montañas crea una barrera a las masas de aire que llegan del Atlántico proporcionando una alta pluviosidad a la comarca; un clima idóneo para el desarrollo de especies como el castaño, que ocupa más de 4.000 hectáreas en las umbrías altas entre Aracena y Cortegana. El parque conserva, además, en sus pueblos y aldeas, un patrimonio cultural de gran valor etnológico y arquitectónico, con restos prehistóricos, fortalezas medievales, mezquitas, edificios civiles e iglesias de enorme interés.

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