Reflexiones de lugareños de interés
Fuenteheridos, junto con Aracena, Galaroza, El Castaño, Jabugo, los Marines y un cúmulo de aldeas que por su toponimia nos dan fe de de la naturaleza del entorno en el que se hallan ubicadas, podemos considerarlo como el enclave más bello de la Sierra de Huelva. En su conjunto constituyen un vergel de castaños, encinas, robles, pinos y frutales que, por el microclima que han generado, parece haber sido arrancado y transferido a Andalucía desde las boscosas zonas asturianas de las que provenían la mayor parte de sus colonizadores. Es por ello por lo que, sin renunciar a la espontaneidad y a la jovialidad que pretenden endilgarle al pueblo andaluz (y aquí estoy utilizando un término local que, por representar la consumación del acto de dar paso a las aguas que han de discurrir por las acequias, constituye en sí mismo la escenificación de lo que como un tópico tratan de conferirnos), entre sus coterráneos todavía nos es dable encontrar reminiscencias que por su naturaleza más parecen ser connaturales de los habitantes de Castilla y León que de una provincia más orientada hacia una familiaridad de rasgos informales que hacia la gravedad, el rigor y la reserva que caracterizan a los castellano-leoneses.
A estos lugares llegué hace cuarenta años. Por aquel entonces, mi estancia en ellos fue tan corta como continuos fueron mis retornos. Hasta que un día (de esto hace más treinta) columbré que el tiempo que estaba perdiendo en el camino era tan solo una parte de lo que con mi asentamiento podría estar ganando.
Yo no diría que amo a esta tierra. Yo creo que el amor precisa de una correspondencia (expresa o tácita) que no puede ser mantenida con un alcornoque. No obstante, su visión (e incluso aquélla que esta relacionada con la contemplación de una de las muchas florecillas que engalanan estos feraces valles y montañas) genera una paz y una identificación con lo que estamos observando, que incluso en la asunción de que con ello no estamos experimentando esa correspondencia, en lo que representa nos sentimos totalmente entregados.
Es por esta filiación por lo que hablando en una reunión con los vecinos de esta villa dije que sin renunciar a mis orígenes, emotivamente me consideraba un papero. (Gentilicio de los naturales de esta villa). Una apreciación que a tenor de la espontaneidad con la que uno de los asistentes la rebatió diciendo que yo había llegado aquí “estampillao” mereció la respuesta por parte de otro. “No le eches cuenta. Está “horro” La verdad es que en aquel momento no entendí lo que quería decir con este apelativo. Y aunque es cierto que posteriormente me lo clarificaron no le encuentro una relación con lo que con el mismo se pretendía manifestar. De todas formas, en aquel “estampillao” no encontré esa connotación con la que algunos pretenden segregar a aquéllos en los que no concurre un RH suficientemente significativo.
Y ahora, cuando ese “estampillao” ha sido tanto por mí, como por casi el resto de los vecinos de este pueblo ha sido asumido y superado (lo cual, en términos cuantitativos representa un porcentaje bastante elevado) aparece el Ministerio de Fomento. Un Ministerio que en función de las enormes competencias que le han sido conferidas, no es de extrañar que en sus manifestaciones se pronuncie de una forma balbuceante. Porque vamos a ver. ¿Cómo puede entenderse el solapamiento existente entre las distintas administraciones que supuestamente tendrían que regular el deseado desarrollo de este Parque? ¿Qué podemos pensar de un Ministerio que por una parte patrocina la rearborestación de la arboleda autóctona y por otra pretende arrasarla construyendo una vía rápida (¿rápida y positiva para quién?) por el corazón de un enclave ecológico que aparte de partirlo en dos, no conllevaría un diferencial significativo con respecto a la velocidad con la que actualmente se circula por la N-433? ¿Es que todos los esfuerzos que se han venido aplicando a esta zona para superar la falta de atención que le ha venido prestando la Administración van a ser borrados de un plumazo debido a las incongruencias con las que desde siempre ésta ha venido actuando?
Yo no quisiera ver lo que temo. Me imagino que como otros muchos tendría que emigrar a otro lugar. Lo que ocurre es que como el balbuceo está tan generalizado, será difícil que ese enclave lo pueda encontrar.