Danza de las Flores (Sanlúcar de Guadiana)

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Historia

Los orígenes de la Danza de las Flores de Sanlúcar de Guadiana no se pueden determinar con claridad. Existen varias teorías que apoyan el inicio de esta danza en diferentes épocas. Los primeros documentos gráficos datan de principio del S.XX, aunque la tradición oral remota esta danza del S.XIX ya que ha sido transmitida de padres a hijos, de generación en generación.

Hay teorías que aseguran que la danza es más antigua, se bailaba en la romería celebrada en honor de la patrona. pero en 1835, a consecuencia de la desamortización de Mendizábal la población perdió esta tradición, hasta que se volvió a retomar en el S.XX, coincidiendo con los primeros documentos gráficos que acreditan su existencia. Ambas teorías coinciden que al contrario de lo que ocurre con otras danzas de origen guerrero, esta es religiosa, algo que queda claro por el protagonismo que tienen las flores durante las mudanzas, unas flores que son un símbolo de acción de gracias.

La danza, aunque ha pasado por años dura principalmente en la década de los 70, en los que no se encontraban danzantes que continuasen con esta tradición sanluqueña, se encuentra en la actualidad muy difundida entre la población.

Durante los 3 días que dura esta festividad en torno al fin de semana siguiente al domingo de resurrección, se alternan los grupos de danza de mayores e infantil con el objetivo de honrar a la Patrona de Sanlúcar de Guadiana. De esta forma, el sábado danza el grupo de mayores; el lunes, el grupo infantil; y el domingo ambos grupos danzan para honrar a la Patrona sanluqueña. Cabe destacar que los danzadores no bailan motivados por fines económicos, sino por su amor y entrega a la Virgen de La Rábida.

En la Danza de las Flores los danzadores, siempre hombres, bailan en número impar, aunque lo ideal es que sean once danzadores repartidos en parejas con un danzador guía. La danza siempre está acompañada por el sonido de la flauta y el tamboril.

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